Ir más allá de la simple charla
Nos comparte que, en su momento, acudió con diversas autoridades en el tema para charlar, “está Stephen Hawking, ¡simplemente…!”, dice con satisfacción; también pudo charlar con lord Martin J. Rees, “el gran y mayor ilustre cosmólogo vivo”. El libro está lleno de pláticas exclusivas, “el lector siempre aprecia que haya un esfuerzo de ir y platicar con esas personas, el esfuerzo por tener estas pláticas originales”.
Chimal niega que Nuevas ventanas al cosmos sea un libro meramente de divulgación, “es más bien un ensayo/crónica de los días galácticos”, su intención fue estar con los investigadores y saber cómo son, “estar con ellos un tiempo; no solamente llegar y platicar un ratito para luego decir adiós”.
Buscó acercarse a la vida cotidiana de los investigadores, “platicar de una manera más pausada” para “entender el fenómeno humano integral; no nada más explicar qué es el átomo, qué es una galaxia o qué es un hoyo negro”.
Para Chimal ese tipo de preguntas le resultan irrelevantes; para él, lo importante es el fenómeno social, “las emociones humanas que están involucradas y las implicaciones filosóficas de sus estudios; lo teleológico: a dónde vamos, de dónde venimos, cuál es nuestro destino”.
Toda esa información de poco serviría si no se puede plasmar con claridad en un texto, al respecto, Chimal se considera siempre comprometido a escribir de la mejor manera posible, “necesitas abarcar al mayor público, con un lenguaje que abarque a todos y sea comprensible por la mayoría, saber escribir buenas frases”.
Asegura que esto se consigue a través de la delicadeza y mucha intuición, “hay que saberlo procesar y ser muy meticuloso”. El escritor asegura que estudiar el universo y ser consciente de sus particularidades es algo que puede transformar la actitud de quienes habitan el planeta: “cuando veo a través de los telescopios y asisto a los observatorios, o simplemente cuando veo la Vía Láctea en la noche, siento esa cosa subyugante de decir que sólo somos un parpadeo…”.